Carlo Ancelotti optó por los viejos roqueros Luka Modric y Toni Kroos para reactivar un centro del campo madridista bastante espeso. La reacción madridista llegó en el segundo cuarto, cuando cerró el camino al aro y, dirigido por Sergio Llull, encontró en la zona a Tavares y Gaby Deck, máximo anotador blanco al descanso con 6 puntos (30-27, min.14). En ataque, el cuadro catalán se las ingenió para alejar a Walter Tavares del aro y atacar la pintura (24-15, min.10), con protagonismo para Kalinic (7 puntos en el cuarto). Ahí van las estadísticas finales del partido. Un partido para el que es una incógnita la presencia Claudio Bravo, que tuvo que ser sustituido en los minutos finales del partido de ayer por un problema físico en su muslo derecho. Ganó presencia el Madrid, que de nuevo se dio de bruces con el larguero con un enorme disparo de Aurélien Tchouaméni y que rozó en tres ocasiones el empate en las botas de Vinícius Jr. El brasileño volvería a encontrarse con el larguero antes de que los jugadores se retirasen a vestuarios – también Jude Bellingham justo después- en otra de las abundantes ocasiones de una primera parte muy vistosa.
El partido podrá reprogramarse por idéntica causa hasta en tres ocasiones. Centro que sale de las botas de Traoré pero no pudo rematar entre los tres palos su compañero. El Panathinaikos griego de baloncesto ha dado un golpe sobre la mesa y ha hecho oficial el fichaje de Juancho Hernangómez para las próximas dos temporadas. El mundo del baloncesto está de luto. El Barça pareció sentenciar gracias a Sanli (69-52, min.33), pero el conjunto blanco jamás se rindió y, guiado por Petr Conelie y un Deck intratable, despertó las inseguridades del cuadro catalán, que encadenó errores ante un rival agigantado. En juego, los puestos europeos y las tres plazas del descenso. Los tres se suman a los positivos ya confirmados de Vincent Poirier, confirmado el pasado lunes, además de Fabien Causeur y Thomas Heurtel. Un derbi sevillano que alcanza una nueva dimensión con los dos equipos metidos en puestos Champions, en segunda y tercera posición de la clasificación liguera respectivamente, y que buscarán tres puntos importantísimos para sus aspiraciones en la competición. El Barça derrotó este jueves al Real Madrid (75-73) en el primer clásico europeo del curso, en un duelo que los azulgranas gobernaron durante 35 minutos, pero casi se les escapó debido al parcial de 6-21 que los blancos -que encajaron su primera derrota del curso- realizaron en el tramo final, liderados por el coraje del argentino Gaby Deck (21 puntos).
Chus Mateo paró el partido y el Real Madrid dio síntomas de mejora, más solido atrás, pero la enérgica defensa del Barça frenó su progresión. El saque en corto de un córner descolocaría al conjunto merengue, mientras Pedri encontraba solo a Dembelé en el interior del área y el francés no perdonaba el primero. En el Barcelona, Dembélé, un puñal por la banda derecha ante un Mendy desbordado, rozó el segundo pero su centro se paseó por el área pequeña sin encontrar rematador. Gran centro de Canales que el de Coín no consigue rematar cuando estaba solo. Canales. «Me ha tocado vivir triunfos en otros sitios, pero de esta manera, nunca», añadió Claudio Bravo. De hecho, Serio Llull estrelló en el hierro el triple de la victoria blanca antes de que Tomas Satoransky (12 puntos, 7 rebotes, 5 asistencias y 22 créditos de valoración) capturara el rebote que certificó el triunfo azulgrana. De inicio, el cuadro azulgrana explotó la envergadura de Satoransky (7 puntos en el cuarto, 9 al descanso) frente a Sergio Rodríguez en el poste bajo para afianzar la primera ventaja, que amplió con dos triples de Nico Laprovittola y Nikola Kalinic (16-6, min.5).
Sostenido en ataque por la muñeca de Jan Vesely (8 puntos al descanso), el Barça recuperó la agresividad defensiva, secó al cuadro blanco durante seis minutos y afianzó su ventaja (40-30, min.20) con un alto índice de acierto (14 de 19 en tiros de dos, por el 10 de 22 del Real Madrid). El Barça goleó al Real Madrid (3-0) en el clásico veraniego de Dallas, en el AT&T Stadium, en un encuentro que fue de todo menos amistoso y que empieza a ser sana costumbre, porque el espectáculo fue mayúsculo pese a ser pretemporada. La primera parte se vivió con pasión y varios roces entre los jugadores, alguna entrada fea y fuera de lugar y una tangana en el último tramo de la mitad para un partido que no parecía nada amistoso. Dirigió a una recién creada selección de Croacia al bronce en el Eurobasket de Alemania en 1993, a pesar de sufrir recientemente la pérdida de su estrella Drazen Petrovic por un accidente de tráfico.